jueves, 5 de marzo de 2015

LA OPERACIÓN DE HERNIA

La hernia (LA QUEBRANCÍA) es importante para quien la padece, así que debe serlo también para su cirujano.
El cirujano no puede asegurar al paciente con hernia que la operación será la cura, por lo que debemos reexaminar constantemente nuestro método para obtener una técnica perfecta. El éxito en la reparación herniaria es el resultado de una minuciosa atención a los detalles de la operación. Ésta debe hacerse encajar en la anatomía, y no seguir planes preconcebidos.
Muchas veces, el cirujano que opera la hernia es elegido por razones adulteradas más que por su habilidad. Cuando esto ocurre, debemos esperar un alto porcentaje de recurrencias.
En mi hospital [Johns Hopkins, Baltimore] la operación de la hernia es relegada como cirugía sin interés.
Solamente un cuidadoso seguimiento puede hacer que el cirujano sepa donde falló y tomará medidas para corregir fallos.
AMOS R. KOONTZ

Eso decían en USA a mediados del siglo pasado. Sin embargo, hoy en España se sigue maltratando al quebrao en la mayoría de los hospitales públicos. Y en todos los privados.

2 comentarios:

  1. No me asuste, después de leer esta entrada me doy cuenta de que mis temores están más que fundados. De todas maneras un espectador imparcial diría que estas absurdas elucubraciones de dos herejes (como usted y como yo) son debido al hedor que aumenta en el ambiente por la cercanía de las fiestas falleras. Bueno paciencia, y reciba un afectuoso saludo.

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    1. Los herniados pertenecientes a nuestro sistema sanitario tienen un alto riesgo de convertirse en carne de “autoconcierto” o de “plan de choque”. Ello implica que en muchos casos, no en todos, serán operados por facultativos sin los conocimientos requeridos, ni en técnica quirúrgica ni en biomateriales.
      Una hernia la puede operar cualquier cirujano general. Pero operarla bien es mucho más complejo. Casi todos los cirujanos que ejercen práctica privada operan hernias, ya que es la patología quirúrgica programada más frecuente. Pero muy pocos de ellos son especialistas en la materia.
      Efectivamente yo (al igual que usted) cometo la herejía de decir lo que pienso. Ya sabe, el españolito vulgar espera callado a que las cosas las denuncie otro, que le den las bofetadas a aquél y poder sacar tajada a costa de los demás.
      Y sí. Uno tiene el ánimo infundido de la mala hostia que se le pone al ver que la ciudad está ya tomada por el atajo de gamberros e impresentables que en la actualidad constituye la mayoría de componentes del mundo fallero. Pero mis ideas sobre el tratamiento de la hernia son de antiguo, incluso en tiempos de paz ciudadana.
      De todas maneras, no se asuste. Ya sabe que yo soy un poco exagerado.
      Saludos cordiales

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