El hábito no hace
al monje
(Proverbio español)
No estoy de acuerdo. La pinta lo dice todo.
Hace años llegaron desde Suresnes unos zaparrastrosos de
trenca aceitosa, chaqueta de pana y morral a mimetizarse con el pueblo llano.
Conseguido el Poder, el uno se cambió pana por Loden, saqueó Galerías Preciados,
se la adjudicó a su testaferro que la
revendió a los dos días por 30 veces lo pagado. Su vice montó despacho en
Sevilla para cazar mordidas; lo echaron. Su otro vice, también despedido por
robar, atracaba en bancos hasta hace nada. Y es que la pinta de muerto de
hambre manifiesta que, en cuanto se pueda, se va a pillar.
Diremos que los enchaquetados de cuello duro tampoco son
garantía de honradez. Ni mucho menos, como comprobamos día a día.
Hoy, nuevos zaparrastrosos de imagen pasada y ridícula nos manifiestan que vienen dispuestos a jurar (cual Escarlata ante Tara) que nunca más pasarán hambre. Y cuando palpan poder, aquí o fuera, ya están trincando. Y es que se les ve… la cola.
Hoy, nuevos zaparrastrosos de imagen pasada y ridícula nos manifiestan que vienen dispuestos a jurar (cual Escarlata ante Tara) que nunca más pasarán hambre. Y cuando palpan poder, aquí o fuera, ya están trincando. Y es que se les ve… la cola.
Cuanta razón tienes.
ResponderEliminarEs que cada vez se les ve más el plumero
Eliminar¡Ay!, con lo que nos gustaría que todos fuera como el amigo Ricki Costa, bien trajeados, con buenas colonias, con 100 gramitos de "caviar" proporcionado por Alvarito el Bigotes.
ResponderEliminarPero no. Éstos, dale que te pego, hasta cantan La Internacional y canciones de Lluis Llach. Parece mentira que varios millones de españolito/as se dejen engañar como chinos. Hay que ver que canguelo se está imponiendo.
Tic tac. Tic tac.
La verdad es que no somos maniqueos. Como tú. Así, ya cité que muchos trajeados también roban y abusan.
EliminarPero sí es verdad que los nuevos zaparrastrosos son un grave peligro para la convivencia. Y se sabe que muchos españolitos están ya pensando en desarchivar sus escopetas. Efectivamente, dan mucho miedo.
Pero lo que más miedo da son esos españoles jodidos que, a pesar de que es a ellos a quienes más van a fastidiar los zaparrastrosos (véase Grecia), prefieren morir a condición de poder joder a suvecino. Eso es España y esos son los españolitos que están pendientes del tic-tac.
Estoy convencido que aunque la nueva casta dirigente proviene del mundo universitario, más endogámico que una monarquía, y donde en sus elecciones sindicales el voto de los docentes vale no se cuentas veces más que el del resto, sus intenciones son "buenas", y nos quieren llevar al nuevo paraíso de la clase obrera a mitad de camino entre el falangismo azulazo de los años 40 y la cochambre bolivariana de principios del siglos XXI. Saludos.
ResponderEliminarLa universidad central está dirigida por el hijo del criminal de guerra más sanguinario en todo el siglo XX español.
EliminarNo hay que explicar nada más.